El método definitivo para ordenar tu caja de herramientas

Antes de seguir leyendo. ¿Tienes una caja de herramientas con espacios diferenciados? Porque te decimos... no, te advertimos... desde ya que es imposible ordenar una caja de herramientas, mucho menos si tiene un uso habitual, si ésta no tiene compartimentos, cajones y espacios diferenciados.

Si no la tienes, no sigas leyendo.

Bueno, sí, sigue leyendo, al final te daremos una solución para este caso.

Tener una caja de herramientas ordenada no solo ahorra tiempo y frustración, sino que también protege tus herramientas y las mantiene en buen estado. Un espacio de trabajo organizado aumenta la seguridad y la eficiencia, ya que reduce el riesgo de accidentes y te permite encontrar lo que necesitas rápidamente.

Ahora bien, de nada sirve que ordenes una vez la caja de herramientas, que decidas donde va cada cosa, que destines un espacio diferenciado para destornilladores y otro para alicates y tenazas si cuando las usas, las devuelves a la caja de cualquier manera, tirándolas dentro, sin limpiar y sin preocuparte por volverlas a poner en su sitio.

Y lo que te vamos a contar hoy sirve tanto para una caja de herramientas como para un mueble o una mesa de trabajo de bricolaje.

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Claves para ordenar tu caja de herramientas para siempre

Como en todo método o procedimiento, vamos a ir paso a paso, porque es la mejor manera de hacerlo bien. Y lo primero es sacar todas las herramientas de la caja y ponerlas en algún lado, el suelo vale, para tener un mapa mental de lo que tienes, lo que usas de lo que tienes, lo que te falta siempre, lo que está roto y lo que es un simple adorno que lo tienes ahí porque te molaba.

¡Empecemos!

Paso 1: Reúne tus herramientas y prepara el espacio de trabajo

Vacía completamente la caja de herramientas

Saca todas las herramientas, piezas sueltas y accesorios. Déjalas en algún sitio, como el suelo o una mesa, donde puedas verlas en conjunto y hacer una idea general del todo.

Clasifica las herramientas

Separa las herramientas por tipo, función o categoría. Puedes utilizar cajas, bandejas o simplemente agruparlas en la mesa o en el suelo.

Puede serte útil más adelante si tu caja de herramientas es un espacio único que vayas buscando algún táper o pequeñas cajas de cartón en las que quepan los distintos grupos de herramienta. Ya verás para qué. 

Limpia las herramientas

Elimina la suciedad, el polvo y la grasa de las herramientas con un paño limpio y seco o con un producto de limpieza adecuado. Esto lo deberías de volver a hacer cada vez que las saques de la caja y las uses. No es que las limpies la primera vez. La primera vez, de hecho, ya están limpias, aún no las has usado.

Revisa el estado de las herramientas

Desecha las herramientas rotas, oxidadas o en mal estado. Repara o afila las que lo necesiten. Sí, ya sabemos que les tienes cariño y aprecio. Que son herencia de madre o abuelo. Pero solo ocupan espacio y el óxido es como la gripe, "se pega".

Si tienes una herramienta almacenada porque es un recuerdo y está vinculada a algunas emociones, búscale otro espacio, haz un cuadro con ella para exponerla o crea una pequeña obra de arte para tenerla siempre a la vista. Pero no guardes por guardar. Hay muchas personas, amantes del bricolaje, que acaban siendo presas de un Síndrome de Diogenes.

Y no es la idea. La idea es ser eficientes.

Prepara el espacio de trabajo

Elige un lugar bien iluminado y con suficiente espacio para trabajar cómodamente. Puedes utilizar una mesa, un banco de trabajo o incluso el suelo. Nuestra recomendación, el suelo. Sueles tener mucho más espacio que en una mesa o banco de trabajo.

Puedes separar las herramientas en grupos sin problemas. Puedes dejar un buen espacio entre grupo y grupo. Y, en general, vas a poder moverte y trabajar mucho mejor. Así que, suelo.

Paso 2: Elige el sistema de organización adecuado

Cajas de herramientas con compartimentos

Las cajas de herramientas con compartimentos divididos son una opción clásica y efectiva para organizar herramientas de diferentes tamaños y formas. Para el equipo de BricoIsla sigue siendo la mejor opción disponible. Además resguardan las herramientas al no dejarlas a la intemperie, que aunque estén en un taller igualmente acabarán acumulando polvo.

Ahora bien, ten en cuenta que la caja de herramientas, cerrada, debe estar en algún lugar seco y aireado. No puede estar en un lugar húmedo o vas a sufrir una enorme pérdida de material.

Paneles perforados

Los paneles perforados te permiten colgar las herramientas en la pared, liberando espacio en la caja y facilitando el acceso a ellas.

Solo lo recomendamos en zonas de trabajo que puedas utilizar de manera frecuente. Y recomendamos que expongas tanto las herramientas de uso habitual como las de uso poco frecuente y que nunca sabes dónde están, dónde las guardaste la última vez o qué hiciste con ellas.

Las herramientas habituales ubícalas en el centro del panel perforado, donde te resulte más fácil acceder, cogerlas y usarlas, dejando a los lados las herramientas de uso menos frecuente.

No utilices paneles perforados con colgadores para simplemente exponer las herramientas y que se vean bonitas. En menos de un par de semanas estarán llenas de polvo. Y si es una zona húmeda (porque vives cerca del mar, por ejemplo, terminarán por oxidarse.

Organizadores modulares

Los organizadores modulares te permiten personalizar el espacio de almacenamiento de acuerdo a tus necesidades específicas.

En el fondo, los organizadores modulares de herramientas son como cajas de herramientas pero en formato armario. Suelen ser verticales y estar compuesto por múltiples cajones de distintos tamaños. Realmente es la mejor opción para el material como tornillería, clavos, repuestos y cualquier otra cosa que puedas utilizar en tus chapuzas.

No mezcles, de hecho, herramientas y materiales. Martillos, alicates o destornilladores, van en un sitio. Tornillos, claves o cinta adhesiva van en otro.

Bolsas y estuches

Las bolsas y estuches son ideales para transportar herramientas específicas o para guardar herramientas pequeñas y delicadas.

Son una excelente opción a las cajas de herramientas, se transportan de manera más cómoda y algunas permiten abrirlas al completo desplegándolas, dejando a la vista todas las herramientas.

Pero son muy incómodas si quieres apilar varias para guardarlas en un estante. De hecho, son muy incómodas. Generalmente las bolsas y estuches sueles almacenarlos encima de otras cajas de herramientas y las usas para tener ahí aquello que siempre usas sí o sí en cualquiera de tus actividades de bricolaje.

Paso 3: Ordena las herramientas por categorías

Bien, ya tienes todo a la vista en el suelo, lo has ordenado y tienes tu cosa donde guardarlas de manera ordenada y con un sentido práctico y eficiente. Que es el sentido que debería tener todo amante al bricolaje.

Si no se te ocurre un orden, te proponemos uno muy básico. Pero si tampoco te gusta éste puedes darte una vuelta por Leroy Merlín u otra gran ferretería en la que puedas pasear por pasillos viendo lo que tienen y observa cómo las clasifican.

• Herramientas manuales: martillos, destornilladores, alicates, llaves, etc.
• Herramientas eléctricas: taladros, sierras, lijadoras, etc.
• Herramientas de medición: cinta métrica, niveles, escuadras, etc.
• Herramientas de corte: cuchillos, navajas, tijeras, etc.
• Herramientas de precisión: Destornilladores de precisión, pinzas, etc.
• Herramientas especializadas: fontanería, electricidad, etc.
• Materiales de sujeción: tornillos, clavos, tuercas, etc.
• Elementos de protección: gafas de seguridad, guantes, mascarilla, etc.

Te recomendamos que uses una caja para herramientas manuales, un espacio mayor para las herramientas eléctricas, pongas en un espacio separado las herramientas especializadas que solo usas cuando haces trabajos tipo fontanería o electricidad, pongas en una caja separada los materiales tipo tornillos, clavos, tacos, tuercas. Y tengas un lugar donde pongas la ropa de trabajo y los elementos de protección.

En resumen:

• Área para herramientas manuales.
• Área para herramientas eléctricas.
• Área para herramientas especializadas.
• Área para materiales.
• Área para vestimenta y protección.

Después de años de experiencia, es el mejor método de clasificación, el que resulta más eficiente y tiene mayor sentido lógico.

Eso no significa que no puedas crear tu propio sistema de clasificación. Al final debe ser práctico para ti.

Paso 4: Utiliza etiquetas y marcadores

Ahora llegamos a un apartado que puede resultar un poco desquiciado o de persona con un trastorno obsesivo-compulsivo. No te lo vamos a negar. Pero si te recomendamos etiquetar, marcar y registrar es porque al final resulta útil. Y no solo útil, evitará que compres herramientas que ya tienes y no necesitas reponer mientras olvidas añadir a tu caja aquello que sí necesitas.

La organización pasa también por la administración.

Etiqueta las herramientas

Utiliza etiquetas adhesivas o rotuladores para identificar cada herramienta o compartimento. No es necesario que pongas una etiqueta con la palabra "martillo" pegada en el mango del martillo. ¡Obviamente!

Se trata de que quede bien visible una etiqueta "destornilladores" por fuera de la caja o el compartimento de la caja que almacena los destornilladores. Especialmente si hablamos de grandes cajas con ruedas, armarios modulares y otros sistemas pensados para guardar un gran número de herramientas.

¡No te vas a acordar de todo ni donde tienes cada cosa! Te lo garantizamos.

Ni siquiera en los talleres profesionales recuerdan dónde tienen cada cosa. Y por eso etiquetan (los buenos talleres).

Marca los niveles de la caja de herramientas

Si tu caja tiene varios niveles, porque es de las gigantes con ruedas, o tienes armarios modulares o armarios de cajones, marca cada nivel o fila con un número o letra para facilitar la ubicación de las herramientas.

Porque ahora te vamos a recomendar que hagas un inventario. A ser posible en Google Docs. Para que lo tengas accesible desde el móvil cuando vayas a la ferretería a comprar y no te acuerdes qué tienes y qué no tienes, qué te hace falta y qué no te hace falta.

Un poco obsesivo. Tal vez. Pero si eres un fanático del bricolaje y tienes un buen número de herramientas y materiales, arreglas chapuzas en casa y también en todos los pisos de la escalera, entonces necesitas hacer inventario. Y para hacer un inventario, además de lo que tienes necesitas saber dónde lo tienes. Y para saber dónde lo tienes debes ponerle un identificador a cada espacio. Así de simple.

Crea un inventario

Elabora una lista de las herramientas que tienes y su ubicación dentro de la caja. Una hoja de cálculo en Google Docs puede ser tu mejor aliada. Además así la tendrás accesible desde tu móvil en cualquier lugar.

Es interesante que a cada fila, que representa cada herramienta, le pongas un número único (lo vamos a llamar identificador) y que ese identificador lo pongas en la herramienta con una pequeña etiqueta.

Pon el nombre genérico de la herramienta, la marca si tiene, el modelo si tiene, la fecha de compra, su estado actual, para que sirve, quién te la regaló o dónde la compraste, etc.

Puede resultar un coñazo al principio pero ya te darás cuenta lo satisfactorio que es y, sobre todo, lo tremenda útil que va a ser.

Paso 5: Mantén la organización a largo plazo

Como decíamos anteriormente, de nada sirve que hagas todo este trabajo si luego eres incapaz de mantenerlo. ¡Cuánta gente conocemos que cuando saca un destornillador de su lugar, luego lo tira sobre la mesa de trabajo y lo deja allí hasta la próxima vez!

O que utiliza una herramienta cualquiera y luego la deja en el primer sitio que le cuadra. Pasando lo que tiene que pasar, que cuando la vuelven a necesitar no la encuentran. Y la vuelven a comprar. Gastando dinero estúpidamente. Porque hay que ver la cara que se nos pone cuando compramos un martillo nuevo y encontramos "el viejo".

Desarrolla un hábito

Dedica unos minutos después de cada uso para guardar las herramientas en su lugar correcto.

Puede ser muy útil tener una caja portátil de uso rápido donde tengas una selección de herramientas básicas que siempre tienen uso. Un taladro con su cargador, algunos destornilladores planos y de estrella, un martillo intermedio, algunas herramientas de corte, llave inglesa y alicates, cúter, guantes y gafas, más una pequeña caja con una cierta variedad de tornillería y tacos.

Digamos que este es tu set de primeros auxilios en bricolaje y chapuzas.

Pero el resto, bien ordenado, si lo coges, al terminar el trabajo, lo limpias y lo pones exactamente en el mismo sitio. Eso requiere tiempo. Aunque estés cansado o cansada, hazlo.

Limpieza regular

Limpia la caja de herramientas y las herramientas periódicamente para evitar la acumulación de suciedad y polvo.

No sabes cuántas veces hemos ido al mueble a coger la sierra y la hemos encontrado llena de serrín, con lo que necesitamos ponernos a limpiar antes de trabajar. Y es una molestia.

Los buenos profesionales lo hacen al revés. Hazlo tú igual. Coge, usa, limpia, guarda. Coge, usa, limpia, guarda. Coge, usa, limpia, guarda. Siempre el mismo proceso.

Revisiones periódicas

Revisa la organización de tu caja de herramientas de vez en cuando y haz los ajustes necesarios. Si la usas poco, como una vez al año, revisa lo que tienes, pregúntate si eso que lleva ahí desde la prehistoria lo has usado alguna vez y si debes seguir cargándolo o sería mejor dejarlo en un espacio para herramientas de uso anecdótico.

Si usas mucho las herramientas, de manera muy frecuente, después de cada limpieza revísala antes de guardarla. No solo sabrás cuándo debas reponer una nueva sino que además vas a evitar futuros accidentes porque te darás cuenta si, por ejemplo, un mango está roto y a punto de partirse.

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Bonus track para obsesivos del orden

Lo del orden y la limpieza de tus herramientas es un mundo que no tiene fin. Como el de tus ganas de comprar una nueva herramienta porque es la última versión mejorada de no sabemos qué. Pero que mola. Y mola mucho. La necesitas aunque no sepas para qué ni cuándo la usarás.

Si eres un acumulador o acumuladora obsesiva de herramienta y materiales, toma buena nota:

• Aprovecha el espacio vertical utilizando estantes, ganchos o barras para colgar herramientas en las paredes o dentro de la caja.
• Invierte en organizadores, que son pequeñas cajas plásticas u otros métodos, de los que hay una gran variedad disponibles en el mercado, que pueden ayudarte a mantener tus herramientas ordenadas y seguras dentro de una caja mayor o un armario.
• Personaliza tu sistema, adaptando el sistema de organización a tus necesidades y preferencias específicas, porque cada bricomaniaco o es distinto.
• Ilumina adecuadamente el espacio de trabajo, lo que te ayudará a encontrar las herramientas que necesitas con mayor facilidad.

Un espacio de trabajo organizado no solo ahorra tiempo y esfuerzo, sino que también aumenta la seguridad y la eficiencia.

Tener una caja de herramientas ordenada te permitirá encontrar lo que necesitas rápidamente, proteger tus herramientas y mantenerlas en buen estado.

Siguiendo los pasos y consejos descritos en este texto, podrás implementar el método definitivo para ordenar tu caja de herramientas y disfrutar de un espacio de trabajo más productivo y seguro.

La clave para el éxito es mantener la organización a largo plazo, desarrollando un hábito de guardar las herramientas en su lugar correcto y realizando revisiones periódicas.

¡Y qué no se te olvide!

• La organización de tu caja de herramientas es un proceso personal que debes adaptar a tus necesidades específicas.
• No existe un sistema de organización único que funcione para todos.
• Lo importante es encontrar un sistema que te ayude a mantener tus herramientas ordenadas y accesibles.

¡Esperamos que estas recomendaciones te sean de utilidad!

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