Ideas para renovar muebles viejos con poco presupuesto: ¡Dale una nueva vida a tu hogar!

Cuando tienes un presupuesto ajustado para renovar (o empezar a decorar y amueblar) tu casa, comprar muebles nuevos puede no ser siempre la mejor opción. Por ello, renovar muebles viejos, ya fueran tuyos, encontrados en la calle, o comprados a un precio muy bajo en un rastro, es la manera perfecta de ahorrar dinero a la vez que realizas una práctica que no solo es sostenible y ecológica, sino que también te ayuda a expresar tu creatividad y tu gusto personal de una manera que se reflejará en tu espacio personal.


Con un poco de imaginación, esfuerzo y materiales económicos, puedes transformar cualquier mueble que de otra manera iría a la basura, en una joya con personalidad para decorar y amueblar los espacios de tu hogar. Hoy te compartiremos algunas ideas inspiradoras para renovar muebles viejos con poco presupuesto.

Pintura

Como no, la primera opción que tenemos es la de pintar el mueble. Aunque requiere un poco de preparación, como el lijado de la superficie, con tan solo pintar ese mueble viejo que tienes tirado por casa, le puedes dar una nueva vida llena de color. La pintura es una herramienta versátil y económica, que además se puede adaptar a tu gusto muy fácilmente: al fin y al cabo, eliges tu la pintura.

Entre tus opciones, puedes elegir darle un cambio radical al mueble, pintándolo de un color totalmente distintos al anterior, o puedes simplemente renovar la pintura (o el barniz) que ya tuviera antes. Puedes elegir un tono que vaya con el resto de tus muebles... ¡o puedes darle un toque de color divertido que destaque entre el resto de piezas! El color del mueble puede ser lo que le de más o menos personalidad.

Si tu mueble ya tenía pintura de antes y se está cayendo, es probable que tengas que usar la técnica del decapado, es decir, quitarle la pintura anterior. Puedes utilizar materiales especiales para quitar la pintura, o puedes lijarla. Esto, por supuesto, con muebles de madera. Y una vez lo tienes sin pintura, lo puedes dejar así, con la madera al descubierto (y algún barniz, ya sea con tinte o transparente), o darle el nuevo color del que hablábamos.

Por último, no podemos olvidarnos de algo más que puedes hacer con la pintura... ¡Patrones y diseños! Puedes pintar los muebles con patrones geométricos, florales o cualquier otro que te guste. Si no eres una máquina con el dibujo, ¡utiliza plantillas!

Papel pintado

Si no te apetece estar manchándote las manos, una opción muy interesante (y que también se puede mezclar con pintar), es el papel pintado. Elegir un papel pintado con un diseño atractivo puede ser un punto de inflexión en la personalidad del mueble que estamos renovando. Además, existen casi tantos o más diseños de papel pintado en el mercado, (como florales y geométricos, y hasta vintage y modernos) que pinturas de colores. Eso sí, asegúrate de elegir uno que combine con tu estilo y la decoración de la habitación, porque es mucho más fácil que un papel pintado no pegue nada con tu habitación que usando pintura.

Lo bueno del papel pintado, es que puedes usarlo tanto cubriendo la superficie completa del mueble, como usarlo tan sólo en ciertas partes específicas, acentuando algunas partes del mueble y dándoles una personalidad especial. Eso sí, recuerda que muchos de estos papeles requieren que luego los protejas por encima con un barniz especial, así que no olvides de conseguirlo si así lo requieren las instrucciones del papel que hayas comprado.

Tapicería

Por supuesto, si estamos hablando de muebles que tengan tapicería, puedes renovarla tú mismo, ¡es más fácil de lo que parece! Solo tienes que empezar por elegir una nueva tela, que sea resistente y fácil de limpiar, a la vez que sea bonita y combine con tu estilo y tu personalidad. Puedes comprarla por metros o usar retales de telas recicladas que tengas por casa, ¡sirven hasta fundas viejas de cojines!

Una vez tengas los materiales, debes retirar la tapicería vieja con cuidado, utilizando una herramienta como un destornillados para quitar las grapas o tachuelas que la sujeten. A continuación, cubre el mueble con la nueva tela y fíjala con grapas. Eso sí, tienes que tener paciencia, ya que tendrás que ir haciéndolo por partes y con mucho cuidado, de manera que no queden arrugas en la tapicería.

Apliques y accesorios

  • Pomos y tiradores: Cambia los pomos y tiradores de las gavetas y puertas por unos nuevos con un diseño más moderno o vintage.
  • Patas: Si el mueble tiene patas, puedes cambiarlas por unas nuevas de madera, metal o plástico.
  • Moldaduras y cornisas: Añade molduras o cornisas de madera o yeso para darle un toque más elegante al mueble.
  • Espejos: Decora el mueble con espejos para darle un aspecto más amplio y luminoso.

Técnicas de restauración

Si el mueble está un poco más dañado de lo normal, tendrás que restaurarlo un poco antes de pasar a la decoración:
  • Reparación de daños: Si el mueble tiene algún daño, como grietas o agujeros, puedes repararlo con masilla para madera o epoxi.
  • Lijado: Si la superficie del mueble está desgastada o pintada, puedes lijarla para eliminar la pintura vieja y dejar la madera al descubierto.
  • Barnizado: Una vez reparado y lijado el mueble, puedes barnizarlo para protegerlo y darle un acabado brillante.

Y recuerda...

Para terminar, te recomendamos algunos consejos básicos que también te serán útiles. Por ejemplo, asegúrate de tener todas las herramientas y materiales necesarios antes de comenzar cualquier proyecto, ¡te ahorrarás muchos viajes a la ferretería! Otro punto importante es que te asegures de trabajar en un espacio bien iluminado y ventilado; si puedes, aprovecha si tienes patio lo suficientemente grande para realizar ahí tus proyectos.

Sigue las instrucciones de seguridad de los productos que utilices, es esencial que tengamos especial cuidado con herramientas que usemos por primera vez, o con cualquier líquido que pueda tener toxicidad.

Y por su puesto, no te desanimes si cometes algún error, siempre puedes corregirlo. Lo más importante es divertirte y disfrutar del proceso de renovación. Al fin y al cabo, ¿qué más da un error en un mueble que puede que de otra manera hubieras tirado, regalado o intentado vender por dos duros?

Renovar muebles viejos con poco presupuesto es una forma creativa y económica de darle un nuevo aire a tu hogar. ¡Anímate a poner en práctica estas ideas y descubre todo el potencial que tiene tu imaginación!

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